Sustituye una pared con una pared de vidrio. … Multiplica la luz con un espéculo.…
Por servirnos de un ejemplo, el amarillo es el color mucho más refulgente que hay, y el púrpura (su color complementario) es el menos refulgente en la rueda de colores.
En prácticamente todos nuestros cuadros necesitaremos aclarar ciertas zonas y obscurecer otras.
Jugar con el claroscuro pertence a los componentes mucho más determinantes en el momento de conseguir volúmenes, luces, reflejos, sombras, etcétera. Controlar esta técnica es verdaderamente un arte, o explicado de otra forma, tener una aptitud visual para ver los infinitos tonos que puede enseñar un color puede transformarse en un auténtico arte pues no es sencillo de poder y especialmente si eres nuevo en la pintura. En verdad, este se encuentra dentro de los inconvenientes más habituales que hallan los alumnos en el momento en que se empiezan en este campo.
Colores vivos para colorear habitaciones oscuras
Amarillo.
Valores de gris y valores inherentes
Tal como los grises con distintas proporciones de negro o blanco tienen distintas valores oscuros o claros, asimismo los tienen distintas colores, en sí mismos, distintas valores visibles. Esto quiere decir que ciertos colores semejan mucho más oscuros y otros mucho más claros, aun sin ponerles blanco o negro.
¿Qué son los colores secundarios?
Los colores secundarios son esos que se forman mezclando, por igual, 2 primarios (esto es: de la mezcla de azul y amarillo sale el verde, el colorado y el amarillo, el naranja y el colorado y el azul, el morado). Por su lado, los colores terciarios se forman mezclando, por igual, un color primario con un color secundario adyacente. De este modo, esta combinación da colorado púrpura, colorado anaranjado, amarillo anaranjado, amarillo verdoso, azul verdoso y azul púrpura.
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LA IMPORTANTE APORTACIÓN DE ISAAC NEWTON
La luz blanca está formada por tres colores básicos: azul, verde y colorado. Corría el año 1665 en el momento en que el físico Isaac Newton estableció un principio que se admite hasta hoy: la luz es color. Una conclusión a la que llegó mediante un ensayo. El físico logró pasar un rayo de luz por un orificio en una habitación obscura, tal es así que, con determinada inclinación, atravesó un prisma de vidrio. La luz se reflejó en una pared a siete metros de distancia y en esta área se dieron a conocer colores, como azul claro, violeta, verde, amarillo, colorado violeta y colorado anaranjado. Un fenómeno que contemplaremos habitualmente en el día a día, tanto en el borde de una copa, como en lo que generalmente se llama arcoíris.
Con la salida del rayo de luz consiguió el fantasma aparente de la luz del sol, probando conque está conformado por una inmensidad de rayos sencillos con distintas ángulos de refracción cada uno de ellos. Newton logró desarticular la luz en los tonos del fantasma.