La luz altera la hormona encargada de arreglar el organismo mientras que dormimos. En el…
Cerrar persianas, cortinas y apagar lámparas o televisores mientras que se duerme es lo destacado para la salud, en tanto que la exposición aun a la luz moderada incrementa el peligro de patologías del corazón y la resistencia a la insulina, apunta una investigación anunciado por la gaceta Proceedings of the National
Secuelas de reposar con la luz encendida
En la actualidad, la tecnología y el planeta 2.0 hacen que unas cosas sean mucho más simples, pero otras mucho más bien difíciles. Todos poseemos teléfonos inteligentes, tabletas u ordenadores desde los que tenemos la posibilidad de tener toda la información sobre, por poner un ejemplo, de qué forma reposar mejor, con un solo click. Pero asimismo quiere decir que pasamos aún mucho más tiempo expuestos a la luz artificial. ¿Quién puede resistirse a ver el móvil inteligente antes de quedarse dormido o ver una película en cama?
Reposar con luz puede modificar el ritmo circadiano del cuerpo. Estar cubierto de luz artificial a lo largo de una gran parte del día (y en ocasiones de la noche) tiene la posibilidad de tener las próximas secuelas:
Reposar con los ojos cerrados
Indagaciones precedentes demostraron una asociación entre la luz artificial durante la noche y incremento de peso y obesidad, modificaciones en la función metabólica, secreción de insulina y avance de diabetes y causantes de peligro cardiovascular.
«¿Por qué razón reposar con las luces encendidas afectaría tu metabolismo? ¿Eso podría argumentar por qué razón hay una mayor prevalencia de diabetes u obesidad (en la sociedad)?», preguntó Zee.
Sueño seguro
Rafaela López, autora del libro Reposar sans pleurer, codirectora de la capacitación profesional sobre el sueño infantil del Centro de Estudios del Sueño del niño y entre las especialistas del aparato de especialistas de Criando con Sentido Común, ha dicho en una entrevista reciente para CSC:
«Las solicitudes sociales y los mitos hacen que impongamos prematuramente hábitos contra la naturaleza. La verdad es que se puede conseguir un equilibrio sin plañir, sin que absolutamente nadie padezca.»
Arrullando al bebé
Comentan que los pequeños arrullados duermen mejor Al paso que ciertos piensan esta es buena técnica, ciertos expertos se oponen a ella, con lo que le aconsejamos que consulte a un médico de seguridad.
Naturalmente, los progenitores tienen temor de que un bebé llore durante la noche. No es una patología, el llanto puede ser pasajero, si persiste, debe proceder a la habitación, pero si no lo justifica, no va a ser preciso sacarlo de la cuna, bastante menos hablarle, cantarle. unas palmaditas en la espalda tienen la posibilidad de ser suficientes para regresar a dormirte
Un recién nacido no le tiene temor a la obscuridad
Por el hecho de que desde el instante en que nació el bebé , sus progenitores lo habitúan a tener una luz encendida comió en la noche, si en algún instante se lúcida y no la halla, se va a sentir muy desamparado, asustado y llorará, pidiendo la existencia de sus progenitores. Así, es esencial que los progenitores acostumbren a sus hijos a reposar en un ambiente relajado, discreto y más que nada obscuro. Los bebés se adaptarán de manera fácil a estos hábitos.
De ahí que, es esencial que el pequeño desde el momento en que nace se acostumbre a este ámbito de silencio y obscuridad. Además de esto, en el momento en que se desee comer o tomar durante la noche, va a ser esencial que haya escasas luces encendidas, pero solo ciertas de orientación, pero jamás la que esté bastante cerca del niño. Se les va a dar de comer con calma, sin que se les entretenga, para no perturbar sus hábitos de sueño. Cuando se sienta lleno y haya calmado su apetito, espera a que eructe y una vez calmado se acostará en su cuna. Así, el pequeño asimismo va a ganar alguna autonomía en el momento de acostarse, en tanto que sabe que sus progenitores están ahí pero no es dependiente de ellos para reposar, se siente cómodo.
Además de esto, la obscuridad provoca que nuestro cuerpo genere una mayor proporción de la hormona melatonina, que estimula el ritmo del sueño y por consiguiente, dado que haya luz provoca que el cuerpo segregue menos de esta hormona y esto puede ocasionar trastornos del sueño y por consiguiente asimismo otros, relacionados con la visión, por poner un ejemplo.