Quién le da el valor a las cosas

El hombre es el único que está en su derecho a ofrecer valor a las cosas. Tiene el poder de elegir qué tiene valor y qué género de valor tienen los seres y elementos.

El balón de fútbol que emplean los pequeños de mi vecindario para jugar en el campo de la urbanización no significa lo mismo, ni tiene exactamente el mismo valor que el balón que jugó la selección de Francia para ganar el mundial de 2018 Pero si además de esto podemos encontrar este balón autografiado por todo el aparato, entonces hablamos de algo considerablemente más apreciado. Una masa de pan en la batidora de la cocina de mi amigo es solo eso, una masa a puntito de hornearse para el desayuno del día después. Pero una masa en la cocina de Ferran Adriá, de los mejores chefs de todo el mundo que obtuvo la máxima distinción culinaria de 3 estrellas Michelin, puede transformarse en algo considerablemente más apreciado y delicioso, un genuino manjar que pertenece a la carta. de los más destacados sitios de comidas de todo el mundo.

Este es un aspecto que fué fundamental para mí desde el instante en que era un niño, y solo por el hecho de que es el mes de mayo me viene a la cabeza adjuntado con cientos y cientos de recuerdos que se repetían cada día en la escuela. . En mi familia era mi padre quien nos llevaba a la escuela todas y cada una de las mañanas, sin faltar ni uno solo. A lo largo de unos años esto incluía un viaje de prácticamente una hora desde Los Ceibos hasta Samborondón donde se encontraba mi instituto Nuevo Planeta. La primera cosa que hicimos al irse de casa fue sugerir nuestro día. Mi papá, con mucha paciencia, nos enseñó que a fin de que todo cuanto hacíamos a lo largo del día no quedara en saco roto, había que ofrecérselo al Señor, ponerlo en sus manos. Y al ofrecerlo, si bien nos olvidáramos de lo que habíamos hecho, el Señor no lo olvidaría. Esto significaba para nosotros como una «cuenta de ahorros» que abríamos en las arcas del cielo, donde íbamos depositando -prácticamente sin percatarnos- todo lo bueno que hacíamos a lo largo del día. La oración (que rezo hasta hoy) afirma de esta manera:

El valor como cualidad ética

En otro sentido, los valores son peculiaridades morales inherentes a la persona, como la humildad, compromiso, clemencia y solidaridad. En la vieja Grecia se trataba el término de valor como algo general y sin divisiones, pero desde la especialización de los estudios han surgido diferentes géneros de valores y se han relacionado con diferentes disciplinas y ciencias.

Los valores son asimismo un grupo de ejemplos que la sociedad ofrece en las relaciones sociales. De ahí que diríase que alguien “tiene valores” en el momento en que establece relaciones de respeto con el resto. Podría decirse que los valores son opiniones de rango superior, compartidas por una cultura y surgidas del consenso popular.