Actualmente el mandil, asimismo llamado mandil, se emplea en el trabajo para contemplar el cuerpo…
Quienes desarrollan los platos de alta cocina y están adelante de los más destacados sitios de comidas son los hombres, si bien esto no significa que estén mejor formados para la alta cocina.
Quién sabe por qué razón, pero comúnmente la categoría de Chef parecería ser un estereotipo prácticamente único del género masculino, no obstante la mayor parte de los que he popular no cocinan en sus viviendas, los Las causas y disculpas que me dijeron van desde “lo que sucede es que estar en todo momento metida en la cocina del lugar de comidas, en el momento en que llego a casa no deseo regresar a comprender cocinar” o “ahhh no, en mi casa la la que cocina es mi mujer, ese espacio es único para ella”.
Si una mujer es chef, si un hombre es chef
Y sucede que el hombre, como ha dicho una vez José Manuel Otero escribió, es una suerte de pavo real que vive contemplándose a sí mismo, encantado de hallarse y sin preocuparse por todo cuanto le circunda. De ahí que es tan simple para él caer en la adulación. La mejor forma de conseguir que realice algo es elogiarlo sin cesar con lo que hace. Pero eso sí, los halagos no tienen la posibilidad de quedarse a puerta clausurada, deben estar apoyados por un reconocimiento de afuera que realice perceptibles frente el resto sus “increíbles” logros.
Si nos centramos en este país, este informe nos enseña que en prácticamente siete de cada diez hogares españoles es la mujer la que cocina.
El hombre está poco a poco más que se encuentra en la cocina, pero su incorporación a las tareas de cocina de la vivienda aún está lejos de lograr el nivel femenino.
Sea como fuere, de a poco, el hombre comienza a asumir tareas en la cocina y, lo que es preferible, le comienza a agradar.
¿Quién es preferible en la cocina, el hombre o la mujer?
Quienes desarrollan los platos de alta cocina y están adelante de los más destacados sitios de comidas son los hombres, si bien esto no significa que estén mejor dispuestos para la alta cocina. Tampoco debe interpretarse como un signo de modernidad, cambio de permisos o igualdad con el otro sexo.
Pero el interrogante primordial es: ¿cuánto hemos cambiado? Y, quizás, la contestación es que no tanto. Según el último estudio efectuado por Global Kitchen, “en el 63,4% de las situaciones, la mujer todavía es la persona que frecuenta cocinar en el hogar”. Este porcentaje cambia según el país y la civilización predominante.