La luz roja es esencial para regular la floración y la fructificación. Además de esto, asiste para acrecentar el diámetro del tallo y estimula la ramificación. Impulsa la fotosíntesis, difiere el desarrollo de las plantas y crea un área foliar mucho más gruesa y pequeña.

Por: Panagiotis Karanikas

El trabajo de un invernadero es proveer una composición para el cultivo de plantas. Ha de ser transparente al sol, pero suficientemente cerrado para achicar la pérdida de calor. Una parte de la radiación del sol que atraviesa el material de revestimiento genera calor y parte se emplea para la fotosíntesis.

Luz en plantas de interior

Así sea en cultivos de invernadero, huertos urbanos o plantas de interior, hay distintas maneras de administrar la luz. Así sea instalando un dosel, jugando a ponérselo o quitárselo en el momento en que hace calor, o algo mucho más profesional como armarios de cultivo (para plantar Cannabis sativa, germinación de semillas, flores, etcétera.), contamos distintas maneras de acrecentar los lujos o suprimirlos

Aun habitualmente, los cristales actúan como difusores para mudar la trayectoria de la luz, como en los invernaderos de vidrio holandeses, y esto perjudica la aptitud de generar fotosíntesis en los cultivos hortícolas.

Ciertos colores claros esenciales usados por las plantas

Azul, colorado, verde, amarillo y ciertos otros colores claros son fundamentales en el ciclo vital de las plantas. Echemos una ojeada a ciertos de estos colores de luz y observemos de qué forma afectan el desarrollo de su planta:

La luz azul tiene una longitud de onda corta y alta energía en el fantasma de color, lo que posibilita que las plantas la absorban. Son fundamentales para la etapa inicial de la planta, como las plántulas, y posiblemente ciertas semillas no germinen si no hay esta luz azul. Esta es la luz que tienes que utilizar en el momento en que tus plantas empiecen a brotar.

La proporción de luz: agilidad de la fotosíntesis

Cada clase de planta es diferente entre sí, con lo que es de aguardar que la fotosíntesis no sea igual para todas y cada una. El comienzo de este desarrollo, por poner un ejemplo, es dependiente de la proporción de luz recibida. Hay un punto en el que las plantas empiezan a generar un mayor volumen de oxígeno del que precisan para respirar. Esta etapa marca el comienzo de la fotosíntesis y se llama punto de compensación de luz. Desde ahí, cuanto mayor sea la proporción de luz absorbida, mucho más rápida va a ser la fotosíntesis.

No obstante, este desarrollo gradual tiene un techo popular como el punto de saturación de luz en el que la fotosíntesis consigue su agilidad máxima. Alén de este punto, una mayor intensidad de luz no va a tener mucho más predominación en el avance de la planta, pero tampoco se va a ver perjudicada.

Pluralidad de colores y temperaturas

Varios creíamos que solo podíamos localizar luces LED en un tono blanco frío. Pero eso cambió, en tanto que hoy día vas a encontrar una extensa selección de colores, y en tonos cálidos. O sea una enorme virtud, en tanto que esta característica las hace idóneas para utilizarlas como iluminación ornamental en distintas zonas de tu hogar.

Otra de las virtudes mucho más interesantes de la iluminación LED es que su fabricación es respetuosa con el medioambiente. Esto causa que su encontronazo ambiental sea bastante menor, cuidando la fauna y la flora, debido a que ayuda a achicar las emisiones de CO2. Como afirmábamos al comienzo, no poseen mercurio, elemento químico que en las luminarias puede ser arriesgado para la gente y el mundo.