Puestos cristianos que prosperan y cotizan en bolsa ya hace 83 años merced a una cruzada que les dejó crear una cuenta en la España de la dictadura, sostienen un organigrama especial: enormes conjuntos empresariales que influyen decisivamente en las políticas económicas, políticas partidos que los favorecen en el campo legislativo, cavernas judiciales que velan por sus intereses, la gentil Inquisición que nutre al rebaño, imperios mediáticos que manipulan la información y algunos ámbitos de las fuerzas armadas que, ocasionalmente, enseñan los dientes.

De esta manera, toda vez que un rayo de luz atraviesa una grieta en su cortina de hierro, la maquinaria empieza a desplazarse. Con su poder infinito, los enormes hombres de negocios cristianos inducen a sus peones en las partidas cristianas que ponen a trabajar a los abogados cristianos que asisten frente a los tribunales cristianos para tener algunas garantías de que sus demandas cristianas van a tener un curso propiamente católico; entonces los jueces cristianos confiesan su procrastinación en confesionarios ultracristianos, la prensa cristiana justifica la necesidad de castigar a los herejes y las leyes mordaza garantizan la paz popular cristiana. En el momento en que se completa el círculo especial, las cosas siguen en su sitio y los errores que se han cometido son perdonados.

Los vicios o defectos han de ser ocultos a fácil vista por el cliente

Esto quiere decir que los defectos no han de ser perceptibles a fácil vista para los usuarios que no tienen entendimientos destacables en esta área. Estos defectos, al no ser detectados a fácil vista, no tienen la posibilidad de ser tenidos presente para permitir la adquisición. En verdad, si se hubiesen popular, el cliente probablemente no habría comprado la vivienda o habría brindado una cantidad menor por ella.

Sin embargo, no puede ser considerado como vicio o defecto oculto cualquier defecto que, si bien indetectable a fácil vista, pudiese ser detectado por el cliente gracias a su profesión u trabajo.

Poblado ibérico de Cánido Oliver

¿Buscas algo único que realizar en Cerdanyola? Indudablemente, tu destino es la Colonia Ibérica de Cánido Oliver, Bien Cultural de Interés Nacional desde 2017.

Hablamos de una enorme colonia ibérica ubicada en la sierra de Collserola, en el territorio que anteriormente se conocía como Layetania . Un ubicación arqueológico habitado entre el siglo VI a.C. hasta el 50 a. y después en la Edad Media.